viernes, 27 de febrero de 2009

El deterioro ambiental en Tlaxcala
Durante el último lustro, la captación de residuos sólidos en los seis rellenos sanitarios existentes en Tlaxcala registró un incremento promedio del 15 por ciento anual; un mismo porcentaje de aumento se prevé para el presente ejercicio, de acuerdo con datos proporcionados por la Coordinación General de Ecología (CGE). En 1995, la captación de basura fue de 292 mil 450 metros cúbicos, y para el ejercicio siguiente fue de 346 mil 330 metros cúbicos. Esa tendencia a la alza continuó en 1994, cuando la captación en los rellenos sanitarios fue de 408 mil 310 metros cúbicos, y ya para 1998 el aumento fue de 14 por ciento. Durante 1999 se recibió 545 mil 295 metros cúbicos de desechos y para el presente año se tiene previsto captar alrededor de 630 mil metros cúbicos, lo que equivale aproximadamente a 90 mil viajes de un camión de volteo, "que dejaron de tirarse indiscriminadamente a lo largo y ancho de la entidad"; es decir, en este ejercicio se captará 24 mil viajes más que en 1999. "Lo anterior se debe a que en la actualidad en los 60 municipios del estado hay un mejor sistema de recolección de desechos, a que se ha ampliado las rutas para los camiones de la basura y a que los trabajadores de estas áreas han mejorado su labor, además de que hemos eliminado los tiraderos clandestinos a cielo abierto. El aumento en la captación no se debe a que hoy en día generemos más basura, aunque en las zonas urbanas sí se registra este problema debido a los hábitos de consumo de la población, los cuales son diferentes a los de las poblaciones rurales", explicó el director de operación de la CGE, Javier Olmedo López. Se calcula que la generación diaria de basura por persona se ubica en un rango de entre 300 gramos y 1.5 kilogramos, dependiendo si se trata de áreas urbanas o rurales. De la totalidad de los residuos sólidos que van a parar a los rellenos sanitarios -ubicados en los municipios de Panotla, Huamantla, Nanacamilpa, Chiautempan, Tetla y San Pablo del Monte-, alrededor de 64 por ciento corresponde a desechos municipales y el resto a basura generada en la industria y por los prestadores de servicios. Se calcula que cuando menos 71 por ciento de los desechos tienen como fuente generadora los domicilios de la entidad y el resto de la basura se distribuye entre el comercio, servicios públicos, servicios diversos y en las oficinas. "La basura que se genera en Tlaxcala es depositada y confinada en rellenos sanitarios y así los 60 municipios de la entidad tienen la posibilidad de disponer de forma adecuada sus residuos y dejar de contaminar su entorno con la proliferación de tiraderos a cielo abierto. El gobierno del estado, a través de la CGE opera estas obras (los rellenos sanitarios) de ingeniería y ubicadas de manera regionalizada, de tal manera que los desechos sean sepultados, pero de una forma segura que evite algún riesgo de contaminación de suelo y cuerpos de agua, tanto superficiales como subterráneos", dijo Olmedo López. Abundó que con esta medida se ha logrado que, paulatinamente, los ayuntamientos cuenten con sistemas de limpia más eficientes, lo cual se ve reflejado en el ingreso de residuos a los rellenos sanitarios. Un ejemplo de esta situación lo encontramos en el caso de Calpulalpan, municipio que en 1998 depositó 17 mil 129 metros cúbicos de basura y en 1999, 18 mil 447. Otro caso es el de Huamantla, uno de los municipios más grandes de toda la geografía estatal, que hace dos años llevó al relleno ubicado en la población de Benito Juárez, de su misma jurisdicción, 21 mil 408 metros cúbicos de basura, y que en 1999 depositó 28 290 metros cúbicos. En el caso del municipio capitalino, en 1998 se recolectó 44 mil 735 metros cúbicos de basura y para el ejercicio siguiente esta cantidad aumentó hasta ubicarse en los 52 mil 295, convirtiéndose así Tlaxcala en uno de los municipios en donde se recolectó una mayor cantidad de basura durante 1999. En contraparte, durante el ejercicio pasado los municipios que menos residuos captaron fueron Tocatlán, Acuamanala de Miguel Hidalgo, Ixtenco, Muñoz de Domingo Arenas y Coaxomulco. Incluso, se considera que Tlaxcala, de acuerdo con su población y extensión territorial, es el estado de la República que tiene una mejor captación de basura. Y no sólo eso, sino que gracias al trabajo conjunto realizado entre autoridades municipales y estatales se puede afirmar que prácticamente ya desaparecieron los tiraderos a cielo abierto que hasta hace algunos años se encontraba cerca de las carreteras. Tan sólo durante el año pasado, en las principales superficies de rodamiento que cruzan por la entidad se recolectó 4 mil 600 metros cúbicos de residuos. Con relación a la composición promedio de los residuos municipales, la Coordinación General de Ecología reveló que 49 por ciento corresponde a materia orgánica, "la cual puede incorporarse fácilmente a suelos erosionados para su regeneración, a través de un proceso biológico natural (composteo)". El 51 por ciento restante se compone de subproductos susceptibles de ser reutilizados o reciclados, como son papel y carbón (20 por ciento), plásticos (8.5 por ciento), vidrio (5.7) y metal (3.3 por ciento). Por otro lado, tomando en cuenta que las industrias son los segundos generadores más grandes de residuos, la dependencia realizó un estudio para saber cuál rama productiva es la que aporta mayores residuos, y se encontró que son las empresas dedicadas al papel y celulosa las que aportan 65.8 por ciento del total de los residuos. El resto se divide entre aquellas que corresponden a las ramas de minerales no metálicos, textil, alimentos, automotriz, confección, servicios, comercial y petroquímica.

II. La problemática ambiental en el estado de Tlaxcala
Los cambios en los modos de vida culturales y socioeconómicos, el crecimiento demográfico, la mancha urbana, el desarrollo industrial y la carencia de programas específicos para la protección ambiental que genere un equilibrio en el desarrollo, ha traído como consecuencias negativas hacia el medio ambiente, un desequilibrio ecológico, en el estado de Tlaxcala en las últimas décadas del siglo XX; como resultado, se han presentado una serie de problemas ambientales que preocupan a las instituciones gubernamentales, como son:
a) La erosión
A nivel nacional 32 millones de hectáreas están siendo fuertemente afectadas por el fenómeno de la erosión eólica e hídrica; es decir, aproximadamente el 80% del territorio nacional muestra algún efecto de degradación. El estado de Tlaxcala no es la excepción, pues según información del INEGI1 se considera la totalidad de la superficie estatal como afectada por procesos erosivos con diversos grados de afectación desde leves hasta altos, ya que de las 401,600 hectáreas que conforman la superficie de la entidad, 120 mil presentan un grado de alteración. Esto hace que la erosión sea uno de los principales problemas estatales.


Cuadro 1

Estimación de áreas erosionadas por entidad (Ha)



En lo que se refiere a las entidades de la República Mexicana, Tlaxcala ocupa el séptimo lugar en erosión, ya que por lo menos 93% de los suelos están erosionados en diversos grados: 70,645 hectáreas presentan erosión inicial; 209,207, erosión severa; 73,346 erosión acelerada y 9,596 están totalmente perdidas. En términos porcentuales se observa que 18% del territorio tlaxcalteca presenta indicios de erosión; 52% erosión moderada; 19% tiene grados erosivos acelerados; 2% totalmente erosionado y sólo 9% no presenta procesos erosivos (cuadro 1).
Como las zonas boscosas se encuentran principalmente sobre laderas, al ser deforestadas son muy susceptibles a la erosión eólica e hídrica. La erosión eólica es la que más daño causa a la tierra; las zonas más erosionadas se encuentran en municipios como Altzayanca, Tequexquitla, Terrenate, Hueyotlipan, Sanctórum e Ixtacuixtla, entre otros.2

En nuestro estado la erosión natural se ve fuertemente acelerada por prácticas humanas que provocan que el suelo sea vulnerable al arrastre por agua y viento: el sobrepastoreo que es resultado de exceso de ganado en una extensión de tierra demasiado pequeña y el manejo inapropiado del uso del suelo y del agua, lo que da lugar a un incremento en erosión, salinación y disminución de la humedad del suelo.
La erosión también es causada por la intensiva utilización mecanizada de técnicas agrícolas sofisticadas que utilizan los agricultores. Estos efectos se pueden observar con mayor frecuencia en las áreas agrícolas de los municipios de Terrenate, Españita, Tlaxco, entre otros, ubicados al norte del estado.
Del mismo modo coadyuvan al problema de la erosión, una resiembra o replantación inadecuada de árboles, los cultivos agrícolas en tierras o suelos inapropiados y la compactación del suelo por maquinaria agrícola, pisoteo por el ganado y el impacto de la lluvia contra superficies de suelo desprotegido.
b) Contaminación del recurso hídrico
El estado de Tlaxcala geográficamente se localiza en la parte alta de la cuenca hidrológica del río Balsas, la cual se encuentra gravemente afectada por la contaminación de sus aguas. Según información vertida en el Primer Encuentro sobre Desarrollo Regional realizado en Saltillo, Coahuila, Tlaxcala ocupa el cuarto lugar en polución de las aguas.3 Cabe señalar que todos los ríos de la entidad son considerados zonas críticas y los afluentes resultan auténticos depósitos de aguas negras. Esto ha traído como consecuencia el aniquilamiento de especies acuícolas y ha provocado un desequilibrio ecológico entre numerosas especies de animales y plantas.
Seis de los siete ríos del estado de Tlaxcala presentan altos índices de contaminación, causados por elevadas descargas de desechos sólidos y líquidos degradados de usos domésticos, agrícolas e industriales. El principal río contaminado por tales circunstancias es el Zahuapan y en menor proporción los ríos Atenco, Atotonilco (Tlaxco), el Atlixtac (San Benito Yauquemehcan) y el río Los Negros, entre otros. Cabe señalar que ninguno de ellos presentan índices de contaminación en los mantos acuíferos.4
El río Zahuapan es uno de los cauces que ha preocupado en mayor medida a la comunidad y autoridades del estado, principalmente por los altos índices de contaminación ya que sus afluentes traen tanto agua limpia proveniente de manantiales como aguas negras no tratadas por usos municipales, industriales, diversos comercios, de servicios, agrícolas, pecuarios, domésticos y en general de cualquier otro uso, así como la combinación de todos ellos.
La contaminación de cuerpos de agua en el estado se debe, principalmente, a las aguas residuales urbanas que se vierten en los diferentes cauces y ríos que atraviesan la entidad. La mayor emisión de residuos no obedece a las descargas de los ayuntamientos más desarrollados, por ejemplo los de la ciudad de Apizaco y Huamantla. En la entidad existen instalados seis sistemas de tratamiento de aguas residuales, el problema son los pequeños asentamientos humanos que vierten sus aguas residuales sin ningún proceso de tratamiento.
El origen de los principales contaminantes que presenta el agua se genera en los desechos domésticos: detergentes y jabones, basuras; desechos industriales: colorantes y pigmentos, disolventes, ácidos grasos, sales, metales y diversas sustancias químicas que suelen ser tóxicas para la salud del hombre, la flora y fauna; así como los agropecuarios: insecticidas, plaguicidas, sales inorgánicas, minerales, desechos animales y fertilizantes entre otros.

c) Deforestación
La deforestación se ha convertido en un problema global. México es uno de los países que presentan mayores índices de deforestación mundial ya que pierde anualmente de 370,000 a 800,000 hectáreas, aunque han llegado hasta un millón y medio.5
En Tlaxcala, la deforestación es un problema que se ha venido presentando a través del tiempo pues se conocen datos donde se demuestra el deterioro y severo despale que ha sufrido el área boscosa. Por ejemplo, se conoce que originalmente la entidad tenía una superficie de 350,000 hectáreas de bosques y en 1949, tenía sólo 108,000 hectáreas Actualmente se reportan 59,000 hectáreas deforestadas (Gráfica 1).
Todos los municipios del estado tienen en común la reducción de sus áreas arboladas; sin embargo, la región del volcán de la Malinche es una de las zonas naturales más boscosas.
En estaárea, a pesar de estar protegida, la superficie arbolada ha disminuido de manera notable y han aumentado las áreas de cultivo en las laderas del volcán. Por ejemplo, en el año de 1500 se reportaba un total de 75,000 hectáreas, en 1936, 30,000 y actualmente, sólo 15,000;6 es decir, que en durante los últimos 60 años la superficie boscosa ha disminuido a la mitad.
De acuerdo con los datos derivados del Inventario Forestal de Gran Visión el estado de Tlaxcala tiene 52,683 has de zonas arboladas, las cuales representan el 13.11% del territorio estatal (4,016 km2). De esta superficie, solamente se están protegiendo 16,433 hectáreas de bosque, mismas que le corresponden al área del volcán de la Malinche y 36,250 hectáreas no reciben ninguna protección por ser zonas de bajo aprovechamiento y rendimiento forestal, no tienen un programa de manejo definido, por ello se hace necesario que exista una planificación ambiental estatal que permita auditar los aprovechamientos, y por otra parte vigilar la masa forestal que no tiene un programa de manejo basado en estrategias de desarrollo sustentable.
d) Pérdida de la biodiversidad
La PROFEPA7 determinó que en el estado de Tlaxcala existen 30 especies de flora y fauna silvestre bajo condiciones de protección, mismas que fueron comprobadas con la norma oficial mexicana (NOM-059-ECOL-1994) que determina las especies y subespecies de flora y fauna silvestre, terrestre y acuáticas, en peligro de extinción, amenazadas, raras y sujetas a protección especial.
En el estado se hallan bajo condiciones de protección una especie anfibia, dos de reptiles, dieciseis de aves, tres de mamíferos, cuatro de hongos y cuatro forestales.
El águila, por su parte, se encuentra en peligro de extinción y en amenazadas: búho, halcón peregrino, calandria de agua o zapotera, halcón, gavilán azulejo mulato, garcita de tular, rata de campo y cacomixtle. Entre las especies florísticas amenazadas se encuentran el hongos Teracua cavica y hongo de mosco.
Las especies sujetas a protección especial son aquellas que están bajo condiciones de limitación o vedas en lo que se refiere a su aprovechamiento debido a que tienen poblaciones reducidas o una distribución geográfica restringida. Entre ellas se encuentran: el ajolote, la víbora de cascabel, el gavilán cola negra, el pato golondrino, el pato chalcuan, el pato boludo, y cerceta de alas azules. En la misma situación se hallan el cedro blanco y el fresno, y los hongos yemita y pancita o pambazo.
Las especies raras (aquéllas cuya población se halla biológicamente restringida a áreas de distribución reducidas a hábitat específicos ) que se localizan en Tlaxcala son: la liebre cola larga, el camaleón, la gallinita y el chipre suelero.
El estado de Tlaxcala no cuenta con inventarios completos de flora y fauna; sin embargo, se tiene conocimiento de algunas especies que han sido erradicadas o cuyas poblaciones siguen reduciéndose, tal es el caso del maguey y del gusano de maguey. La sobreexplotación de estas dos especies se debe, principalmente, a que los mixioteros, no desean continuar con su cultivo y prefieren la introducción y cambios hacia otros cultivos;3 principalmente en las regiones de Domingo Arenas, Villa real, Villa Alta, Calpulalpan, Terrenate y Tlaxco. Otras especies que se encuentran todavía más restringidas son algunas orquídeas terrestres localizadas en el municipio de Ixtacuixtla, así como las plantas insectívoras que se localizan en algunas de las partes más húmedas de Tlaxco y Calpulalpan.

e) Contaminación por residuos sólidos y peligrosos
En el ámbito de la contaminación ambiental por residuos sólidos ocupan un lugar preponderante, ya que son materiales que requieren de un manejo eficaz y con normas de seguridad para evitar daños al ambiente. Por su origen, los residuos sólidos municipales se pueden definir como todos aquellos materiales derivados de las actividades urbanas (las domiciliarias, comerciales y de establecimientos de servicios), así como lo generados por la infraestructura urbana como la red vial, el transporte y las redes de drenaje. En términos generales se puede decir que las principales fuentes de generación de residuos sólidos municipales son los domicilios, los comercios, los servicios, las áreas públicas y, principalmente, la industria.
Por ejemplo, la basura es un problema en el estado de Tlaxcala ya que se generan hasta 800 toneladas diarias. Los servicios de limpieza y recolección captan hasta 600 toneladas que son depositadas en los cinco rellenos sanitarios que existen en la entidad; el resto es arrojado a tiraderos clandestinos, barrancas, ríos o en las orillas de las carreteras.
Se estima que cada tlaxcalteca urbano genera diariamente 800 gramos de basura; en cambio la población rural a nivel individual produce 500 gramos de compuestos, en promedio, por un 40 ó 50% de materia orgánica.
De acuerdo a los datos de SEMARNAP (1997)8 se proyecta que la producción de basura per capita en Tlaxcala alcanzará poco más de 900 g en el 2000 y 1 kg para el 2005, lo que llevará a una generación, tan sólo para la ciudad de Tlaxcala, de aproximadamente 25 mil toneladas al año. Ante este panorama, la gestión de los residuos sólidos municipales debe comprender la recolección, el manejo y la disposición final de los mismos, y tener como objetivo la preservación de la salud pública. Los municipios que registran más contaminación por desechos sólidos son: San Pablo del Monte, Papalotla, Tenancingo, Mazatecochco, Ixtacuixtla y Nativitas.9
La cantidad de basura que se genera como resultado de las actividades diarias es un importante agente de deterioro ambiental; además, de ocupar grandes espacios para su confinamiento. Deshacerse de las grandes cantidades de basura que genera nuestro moderno estilo de vida consumista es uno de los conflictos socioculturales más difíciles de resolver. Por ello debemos enfocar el problema de los residuos sólidos teniendo en cuenta la planificación y la gestión ambiental como objetivos principales para tratar y disminuir la cantidad de desechos.

Gráfica 1

Disminución de la superficie boscosa del estado de Tlaxcala





Por otra parte, en la entidad existen 500 empresas productoras de residuos peligrosos, de las cuales 32 son consideradas de alto riesgo dentro de la petroquímica y la rama metal-mecánica básica e industria eléctrica. Según un estudio del Instituto Nacional de Ecología, cada año Tlaxcala genera 60 mil toneladas de residuos peligrosos industriales. Este volumen representa el 0.75% de la totalidad del material que se genera en las 32 entidades federativas del país. Sin embargo, sólo el 12% de los desechos generados reciben un manejo adecuado como confinamiento controlado, reciclaje (principalmente de solventes, aceites, residuos metálicos y plásticos, reciclaje energético de residuos de combustibles y exportación de aceites contaminados.10
Los problemas antes mencionados no son los únicos; en la entidad también se presenta contaminación por ruido producida principalmente en las zonas urbanas a causa del flujo vehícular, y por la instalación de algunos talleres y fábricas dentro del área urbanizada. Los obreros se quejan que en las fábricas se produce mucho ruido debido al alto volumen de la música; también por la actividad constante que realiza el hombre en su casa, en su trabajo y hasta en sus diversiones.
De igual forma se presenta la contaminación atmosférica. Se emanan olores putrefactos por las emisiones de humos, desechos industriales, polvos provenientes de desechos secos y gases. Esta contaminación no es considerada de gravedad, pero en el futuro es necesario tomar las medidas y desarrollar estrategias de prevención.


III. Políticas y lineamientos gubernamentales


La conservación del medio ambiente y el rescate ecológico en Tlaxcala requiere de implementar estrategias de desarrollo integrales y políticas estatales basadas en una planificación ambiental regional que atiendan, simultáneamente, el ámbito naturaleza-sociedad; es decir, la búsqueda de una adecuada relación del hombre con su medio. En el terreno biológico se refiere a la restauración y manejo ecológico de las áreas impactadas negativamente.
Hagamos un recuento de las políticas gubernamentales en la materia de 1987 a 1999. En el Plan Estatal de Desarrollo de Tlaxcala de 1987-1993, las líneas de acción que se implementaron, con relación a la preservación del medio ambiente fueron las siguientes:
- Establecer un acuerdo de coordinación para elaborar un diagnóstico de los niveles de contaminación en el estado y una estrategia que permita revertir el proceso.
- Identificar las industrias que no cuenten con equipos anticontaminantes de aguas, suelo y aire, para que los adquieran y se controle el uso eficiente de los mismos.
- Actualizar los reglamentos aplicables en materia de desarrollo industrial para el establecimiento y ampliación de industrias en el estado, seleccionándolas por rama de producción en los diferentes corredores para un mejor control de desechos contaminantes.
- Garantizar los resultados de la campaña anual de reforestación conservación y aprovechamiento racional del bosque, a través de la participación organizada de los productores y de la comunidad.
- Identificar a los quince municipios que cuenten con condiciones ecológicas idóneas para el establecimiento de viveros municipales.
- Diseñar y aplicar programas de recuperación y conservación de suelos, en las áreas de erosión severa y con la siembra de magueyes y nopales en torno a las parcelas, así como el uso de desechos orgánicos procesados para regeneración de suelos.
- Identificar los cuerpos de agua contaminados, mediante técnicas específicas, con miras a explotarlos integralmente y protegerlos con la construcción de bordos y siembra de magueyes.
- Establecer un acuerdo de coordinación para la construcción de un jardín botánico, su consolidación operativa y su mantenimiento permanente, concertando la participación de los sectores social y privado.
Por su parte, el Plan Estatal de Desarrollo de 1993-1999 se menciona que en Tlaxcala al igual que en el resto del país, el crecimiento demográfico e industrial, la urbanización no planificada ha deteriorado el ecosistema, de tal forma que en la actualidad es patente la degradación y agotamiento de sus recursos naturales. Ante este problema el gobierno de Tlaxcala se planteó las siguientes acciones:
- Fortalecer las funciones relativas a la ecología y mejoramiento ambiental.
- Educar y concientizar a la población en relación a las conductas que debe llevar a cabo para la preservación y cuidado del medio ambiente. En este sentido se impulsará el estudio de la materia especialmente en los niveles básicos de educación.
- Involucrar a todos los sectores de la población en la responsabilidad conjunta que implica la solución de los problemas ambientales.
- Establecer ordenamientos legales basados en criterios de orden científico y técnico, encaminados al uso y protección de los recursos naturales.
- Determinar y establecer zonas de reserva ecológica en la entidad.
- Llevar a cabo acciones sistemáticas de reforestación.
- Continuar y fortalecer los sistemas de monitoreo de descargas de aguas residuales, buscando alternativas para su tratamiento y reuso.
- Promover la intensificación de los programas de verificación vehicular y de emisiones industriales.
- Reforzar la construcción y equipamiento de los rellenos sanitarios.
- Buscar sistemas alternativos para la recolección, reciclaje y disposición final de residuos sólidos.
- Promover la protección y rescate de los mantos acuíferos.

IV. Acciones realizadas

De acuerdo a las líneas de acción que se establecieron en los Planes Estatales, en el estado de Tlaxcala se han realizado una serie de actividades y estrategias para el desarrollo ambiental y el manejo de los recursos deteriorados. En este apartado analizaremos primero se analizan las acciones que se han implementado para combatir la problemática ambiental durante dos periodos: de 1987 a 1992 y de 1993 a 1998.
Entre las actividades que se realizaron en el primer periodo para luchar contra el deterioro ambiental destacan el combate a la erosión por lo que se intensificaron las acciones de conservación y rehabilitación de suelos, se buscó su regeneración mediante el enriquecimiento de nutrientes a la superficie, y se llevaron a cabo actividades para su recuperación, a través de la incorporación de 20 mil toneladas de abono de bovino, que beneficiaron a 400 hectáreas en 1989. Asimismo, se dio atención a 3 mil 766 hectáreas de tierras erosionadas para incorporarlas posteriormente al cultivo de temporal, todo ello como parte de las acciones tendientes a restablecer el equilibrio ecológico de Tlaxcala. También se efectuaron trabajos de regeneración, principalmente en la zona de la Malinche, en Tlaxco y en los cerros Blancos de Totolac.
Para continuar con el mejoramiento de la calidad de los suelos erosionados y la preservación de las especies nativas, en 1990, se realizaron diversas investigaciones especializadas; los suelos agrícolas se robustecieron con la incorporación de 26 mil toneladas de abono orgánico en más de 500 hectáreas; en lo que se refiere a la recuperación de suelos erosionados, se rehabilitaron mil 11 hectáreas. Otro aspecto importante que se ha atendido es la disminución del efecto erosivo en los suelos no agrícolas.
En 1991 el rescate de suelos para su incorporación productiva se realizó mediante la roturación de mil hectáreas, la rehabilitación de 305 hectáreas y la aplicación de materia orgánica para la regeneración de otras 146, además del movimiento de 61 mil metros cúbicos de tierra por el desazolve de canales.
Por su parte, el control de la contaminación del agua y su incidencia en la cuenca Atoyac-Zahuapan se atiende con diversas acciones del sector público y privado. En 1989 se rehabilitaron 18 lagunas de tratamiento, se construyeron 3 colectores y se equiparó la unidad de control de Tlaxcala; los empresarios destinaron una inversión para la construcción de 38 plantas de tratamiento en el interior de sus fábricas.
En 1990 el sistema regional de control de la contaminación del río Zahuapan continúo su consolidación al entrar en operación dos plantas de tratamiento de agua: «Apizaco B» y «Atlamaxac». Posteriormente, con asesoría técnica de la Comisión Nacional del Agua y SEDUE, se optimizó la operación de 6 plantas de tratamiento.
En 1992, a fin de mejorar la calidad del agua, se buscó la consolidación de las unidades regionales de tratamiento, para lo que se construyeron lagunas de tratamiento para alcantarillados municipales y se rehabilitaron algunas para reforzar la ya existentes. También se mejoraron los instrumentos y técnicas de laboratorio empleadas en Tlaxcala para analizar los parámetros de la calidad del agua y de los gases de combustión. Previo análisis y derivados de los resultados, se establecieron condiciones particulares de descarga de aguas resi-duales a empresas ubicadas en el estado.
La reforestación es una de las acciones que de forma cotidiana se realiza en la entidad, mediante una estrategia integral que se sustenta en la participación de los tres ámbitos de gobierno y la acción concertada con los sectores social y privado. En 1989 se plantaron 3 millones de árboles, en 1990 se reforestó con un millón 830 mil ejemplares en 27 municipios de la entidad, en 1991 se produjeron poco más de 10 millones de árboles y se plantaron 2 millones 757. En 1992 se logró la plantación de 2 millones 400 mil árboles y se considera el año con menor superficie forestal siniestrada. Para alimentar el programa de reforestación en este periodo llegaron a funcionar 19 viveros, 5 federales y 14 municipales, los que en conjunto produjeron más de 3 millones de plantas.
Para regularizar la disposición de la basura, que es un problema grave dio inicio la operación del Sistema Integral de Manejo de Desechos Sólidos (SICORT), empresa gubernamental que da tratamiento en sus instalaciones a un promedio de 560 toneladas diarias de basura en seis rellenos sanitarios. Además de esta acción se suma el esfuerzo desarrollado en campañas de información y educación para el reciclaje y selección de basura.
El mejoramiento de la calidad del aire es una preocupación constante, por lo que la Secretaria de Desarrollo Social en coordinación con el Gobierno del estado ha mantenido estrecha vigilancia de las emisiones industriales y ha promovido la instalación de 16 sistemas anticontaminantes. Sin embargo, no se cuenta con datos estadísticos que permitan determinar las consecuencias y efectos de este tipo de problemas.
Durante el periodo 1993-1998 las acciones más importantes que se llevaron a cabo fueron la creación de la Coordinación General de Ecología en 1993 y la estructuración de un marco jurídico estatal formado por la Ley de Ecología y de Protección al Ambiente del Estado que se publica en 1994. En complemento a la Ley antes citada, se publicaron en 1994 el Reglamento Interior de la Coordinación General de Ecología y el de Residuos Sólidos no Peligrosos. En 1995 el de Prevención y Control de la Contaminación Generada por Vehículos Automotores. En 1996 el de Impacto Ambiental, el de Manejo de Recursos Vegetales, de Prevención y Control de la Contaminación del Agua y a la Atmósfera y el de Emisiones de Ruido, Energía Térmica y Lumínica. En 1997, el de Manejo y Administración del Parque Nacional Malinche.
Además, se publicaron dos acuerdos y dos normas estatales: en 1995, el que establece las cuotas que los usuarios deben pagar por la conducción y saneamiento de sus aguas residuales en las plantas de tratamiento y en 1996 el que determina las tarifas por la disposición final de los residuos sólidos no peligrosos en los rellenos sanitarios. En 1997 se publicó la Norma Técnica Estatal que define los criterios y especificaciones para la protección y fomento de los Metepantles y la relativa a la infraestructura e identificación institucional que deben observar los centros de Verificación Vehícular autorizados en la entidad. En 1997 fueron publicados el Decreto de Adiciones y Modificaciones al Reglamento en Materia de Prevención y Control de la Contaminación Generada por Vehículos Automotores.
Asimismo, en 1994 se crean las Comisiones Municipales de Ecología, que son órganos de carácter administrativo cuyas funciones y objeto son: analizar y resolver los problemas ambientales del municipio, así como vigilar que se ejecuten las disposiciones y acuerdos del Ayuntamiento en materia ecológica; preparar estudios acerca de los problemas ecológicos del municipio y con base en ellos elaborar el proyecto de reglamento respectivo. Realizar las labores de concertación con la ciudadanía para difundir los programas oficiales de la materia y propiciar la participación ciudadana en las tareas que de ellos se deriven.
Con respecto a la reforestación, en el periodo 1993-1998 se logró la plantación de más de 26 millones de árboles (incluyendo frutales, nopales y magueyes). Cerca de 24% fueron plantados en el Parque Nacional La Malinche, bajo un programa de reforestación que tuvo la garantía de supervivencia de cuando menos el 90% de los árboles sembrados a un año de su realización, así como la supervisión y evaluación directa por parte de las autoridades federales, municipales y comunidades de la zona.
Se realizaron acciones para el tratamiento de las aguas residuales para que no sean vertidas a cuerpos receptores, especialmente en la Cuenca del Atoyac-Zahuapan y algunas localidades aledañas a la Laguna de Atlangatepec. También se llevaron a cabo acciones para el mejoramiento de infraestructura y sustitución de equipos, lo que permitió incrementar el volumen de aguas tratadas. Para este mismo propósito se incorporó tecnología de vanguardia que oepra desde 1996 en el pantano artificial de Quilehtla, y que utiliza material vegetal para limpiar las aguas; su eficiencia de operación es de 95% y su capacidad de 118 mil metros cúbicos por año. Por su parte, los mismos niveles de eficiencia y una capacidad de tratamiento mayor a los 612 mil metros cúbicos anuales se hallan presentes para verter el agua tratada en la laguna de Totolcingo, uno de los principales mantos acuíferos del estado.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, en coordinación con la Procuraduría General de la República han realizado una serie de acciones para evitar la explotación de los recursos naturales. Por ejemplo, han puesto gran interés en la preservación de especies amenazadas y protegidas, se ha controlado el aprovechamiento irregular de la flora y la fauna mediante recorridos de vigilancia en todo el territorio, se han realizado operativos de revisión a vehículos en las principales vías de comunicación y verificaciones en sitios de comercialización de aves canoras y de ornato e inspecciones a actividades relacionadas con el aprovechamiento de algunas especies vegetales. Para proteger la fauna silvestre y conocer su potencial, se logró que la entidad estuviera en veda en la temporada 1997-1998.
Además, para vigilar el aprovechamiento de los recursos naturales, se constituyeron los Comités Forestales de Cuapiaxtla, Calpulalpan, Sanctórum, Tlaxco y el de Piedra Canteada, en Nanacamilpa, así como el de vigilancia de pesca y caza de la presa de Atlangatepec.
El Sistema de Control de Residuos Sólidos continúa conformado por seis rellenos sanitarios regionales. Asimismo, en 1997 se dio inicio a las actividades de regulación de los centros de acopio para su reciclamiento. Con ello se reduce el volumen que se deposita en los rellenos sanitarios y se prolonga su vida útil. Desde 1995 se cuenta con una celda especial para la disposición y control de residuos biológicos infecciosos. Es importante resaltar que Tlaxcala es el primer estado, a nivel nacional, que realiza la separación de los residuos biomédicos y su desactivación biológica.
Las actividades de limpieza se consolidan a través de los servicios municipales y de la captación de los residuos de origen industrial y de servicios, evitando su disposición inadecuada. Se realizó el saneamiento de tramos carreteros, y con el apoyo del Programa de Empleo Temporal se llevó a cabo la limpieza de barrancas, cuerpos de agua, panteones, carreteras, manantiales y tiraderos clandestinos, lo que permitió reducir la contaminación del suelo y la proliferación de fauna nociva. En apoyo a esta actividad se dotó de camiones de volteo a los 16 municipios creados en 1994.
Para prevenir la contaminación visual se establecieron los lineamientos y acciones específicas, determinando los lugares adecuados de fijación de propaganda y publicidad, promoviéndose como medida complementaria, el saneamiento y retiro de éstas con la participación de los ayuntamientos y partidos políticos. Se definieron las medidas para la regulación de la actividad de establecimientos de compra-venta de autopartes usadas y se están designando sitios para la disposición de escombros.
Para controlar la contaminación atmosférica causada por vehículos automotores, operan 20 centros de verificación vehicular, que adecuaron sus instalaciones y modernizaron su equipo, profesionalizaron el servicio y se aplicaron evaluaciones a su personal, realizándose en este periodo 71,640 revisiones.
En la preservación de nuestros recursos naturales, es fundamental la educación y la concientización en la población, en relación con las conductas para el cuidado del entorno ecológico, por lo que se han realizado campañas de concientización y se han impartido pláticas, talleres, seminarios y conferencias, así como también se publican boletines de prensa y se transmiten entrevistas en televisión y radio.


V. Conclusiones

El estado de Tlaxcala presenta problemas ambientales que pueden traer consecuencias negativas si no se toman las medidas necesarias para su solución. Ejemplos claros son la contaminación del agua y la calidad del agua, cuyos niveles llegan a ser preocupantes en algunas regiones por la presencia de metales pesados y otros elementos nocivos de origen industrial como solventes, o domésticos como los detergentes.
En este sentido, es necesario generar sistemas de reciclaje y reuso que permitan disminuir la generación de residuos sólidos, ya que en la entidad la disposición final sólo se realiza mediante su confinamiento en rellenos sanitarios, por lo que debe considerarse prioritario alargar su vida útil.
La deforestación puede traer serios impactos ambientales y sociales considerando que los bosques son los reguladores del ambiente, evitan la erosión, eliminan el bióxido de carbono y proporcionan oxígeno, favorecen la recarga de los acuíferos, preservan la diversidad de flora y fauna y gracias a ellos, es mayor la eficacia con que pueden aprovecharse los recursos hidrológicos para casi todas las actividades humanas: riego, usos domésticos, usos industriales, y producción de energía eléctrica.
Los gobiernos del estado durante el periodo de 1988 a 1999 han hecho esfuerzos para combatir el deterioro ambiental, a través de las diferentes acciones analizadas; sin embargo, hace falta mayor participación y conciencia ciudadana para obtener éxito en las labores que se emprendan.
Del primer periodo de gobierno se puede concluir que se trató de dar la misma importancia a todos los problemas ambientales y se intentó atenderlos de forma equilibrada; mientras que en el segundo periodo se dio mayor importancia a la creación del marco jurídico, que se consideró la base para resolver el deterioro ambiental a largo plazo y se priorizaron las actividades para atender los problemas que se valoraron como más relevantes.
Consideramos que el marco legal que se estableció en este último periodo traerá como consecuencia la disminución del deterioro ambiental en todos los aspectos, cabe señalar que es importante que se de a conocer y se aplique la legislación ecológica y los reglamentos de forma extensiva y que se hagan cumplir de manera efectiva.
A pesar de las líneas de acción que se han formulado para combatir la problemática ambiental, ésta continúa creciendo a pasos gigantescos y si no se hace cumplir el marco jurídico lo antes posible, el estado de Tlaxcala será uno de los más deteriorados ambientalmente en la República Mexicana.

El deterioro ambiental en Tlaxcala
Durante el último lustro, la captación de residuos sólidos en los seis rellenos sanitarios existentes en Tlaxcala registró un incremento promedio del 15 por ciento anual; un mismo porcentaje de aumento se prevé para el presente ejercicio, de acuerdo con datos proporcionados por la Coordinación General de Ecología (CGE). En 1995, la captación de basura fue de 292 mil 450 metros cúbicos, y para el ejercicio siguiente fue de 346 mil 330 metros cúbicos. Esa tendencia a la alza continuó en 1994, cuando la captación en los rellenos sanitarios fue de 408 mil 310 metros cúbicos, y ya para 1998 el aumento fue de 14 por ciento. Durante 1999 se recibió 545 mil 295 metros cúbicos de desechos y para el presente año se tiene previsto captar alrededor de 630 mil metros cúbicos, lo que equivale aproximadamente a 90 mil viajes de un camión de volteo, "que dejaron de tirarse indiscriminadamente a lo largo y ancho de la entidad"; es decir, en este ejercicio se captará 24 mil viajes más que en 1999. "Lo anterior se debe a que en la actualidad en los 60 municipios del estado hay un mejor sistema de recolección de desechos, a que se ha ampliado las rutas para los camiones de la basura y a que los trabajadores de estas áreas han mejorado su labor, además de que hemos eliminado los tiraderos clandestinos a cielo abierto. El aumento en la captación no se debe a que hoy en día generemos más basura, aunque en las zonas urbanas sí se registra este problema debido a los hábitos de consumo de la población, los cuales son diferentes a los de las poblaciones rurales", explicó el director de operación de la CGE, Javier Olmedo López. Se calcula que la generación diaria de basura por persona se ubica en un rango de entre 300 gramos y 1.5 kilogramos, dependiendo si se trata de áreas urbanas o rurales. De la totalidad de los residuos sólidos que van a parar a los rellenos sanitarios -ubicados en los municipios de Panotla, Huamantla, Nanacamilpa, Chiautempan, Tetla y San Pablo del Monte-, alrededor de 64 por ciento corresponde a desechos municipales y el resto a basura generada en la industria y por los prestadores de servicios. Se calcula que cuando menos 71 por ciento de los desechos tienen como fuente generadora los domicilios de la entidad y el resto de la basura se distribuye entre el comercio, servicios públicos, servicios diversos y en las oficinas. "La basura que se genera en Tlaxcala es depositada y confinada en rellenos sanitarios y así los 60 municipios de la entidad tienen la posibilidad de disponer de forma adecuada sus residuos y dejar de contaminar su entorno con la proliferación de tiraderos a cielo abierto. El gobierno del estado, a través de la CGE opera estas obras (los rellenos sanitarios) de ingeniería y ubicadas de manera regionalizada, de tal manera que los desechos sean sepultados, pero de una forma segura que evite algún riesgo de contaminación de suelo y cuerpos de agua, tanto superficiales como subterráneos", dijo Olmedo López. Abundó que con esta medida se ha logrado que, paulatinamente, los ayuntamientos cuenten con sistemas de limpia más eficientes, lo cual se ve reflejado en el ingreso de residuos a los rellenos sanitarios. Un ejemplo de esta situación lo encontramos en el caso de Calpulalpan, municipio que en 1998 depositó 17 mil 129 metros cúbicos de basura y en 1999, 18 mil 447. Otro caso es el de Huamantla, uno de los municipios más grandes de toda la geografía estatal, que hace dos años llevó al relleno ubicado en la población de Benito Juárez, de su misma jurisdicción, 21 mil 408 metros cúbicos de basura, y que en 1999 depositó 28 290 metros cúbicos. En el caso del municipio capitalino, en 1998 se recolectó 44 mil 735 metros cúbicos de basura y para el ejercicio siguiente esta cantidad aumentó hasta ubicarse en los 52 mil 295, convirtiéndose así Tlaxcala en uno de los municipios en donde se recolectó una mayor cantidad de basura durante 1999. En contraparte, durante el ejercicio pasado los municipios que menos residuos captaron fueron Tocatlán, Acuamanala de Miguel Hidalgo, Ixtenco, Muñoz de Domingo Arenas y Coaxomulco. Incluso, se considera que Tlaxcala, de acuerdo con su población y extensión territorial, es el estado de la República que tiene una mejor captación de basura. Y no sólo eso, sino que gracias al trabajo conjunto realizado entre autoridades municipales y estatales se puede afirmar que prácticamente ya desaparecieron los tiraderos a cielo abierto que hasta hace algunos años se encontraba cerca de las carreteras. Tan sólo durante el año pasado, en las principales superficies de rodamiento que cruzan por la entidad se recolectó 4 mil 600 metros cúbicos de residuos. Con relación a la composición promedio de los residuos municipales, la Coordinación General de Ecología reveló que 49 por ciento corresponde a materia orgánica, "la cual puede incorporarse fácilmente a suelos erosionados para su regeneración, a través de un proceso biológico natural (composteo)". El 51 por ciento restante se compone de subproductos susceptibles de ser reutilizados o reciclados, como son papel y carbón (20 por ciento), plásticos (8.5 por ciento), vidrio (5.7) y metal (3.3 por ciento). Por otro lado, tomando en cuenta que las industrias son los segundos generadores más grandes de residuos, la dependencia realizó un estudio para saber cuál rama productiva es la que aporta mayores residuos, y se encontró que son las empresas dedicadas al papel y celulosa las que aportan 65.8 por ciento del total de los residuos. El resto se divide entre aquellas que corresponden a las ramas de minerales no metálicos, textil, alimentos, automotriz, confección, servicios, comercial y petroquímica.

II. La problemática ambiental en el estado de Tlaxcala
Los cambios en los modos de vida culturales y socioeconómicos, el crecimiento demográfico, la mancha urbana, el desarrollo industrial y la carencia de programas específicos para la protección ambiental que genere un equilibrio en el desarrollo, ha traído como consecuencias negativas hacia el medio ambiente, un desequilibrio ecológico, en el estado de Tlaxcala en las últimas décadas del siglo XX; como resultado, se han presentado una serie de problemas ambientales que preocupan a las instituciones gubernamentales, como son:
a) La erosión
A nivel nacional 32 millones de hectáreas están siendo fuertemente afectadas por el fenómeno de la erosión eólica e hídrica; es decir, aproximadamente el 80% del territorio nacional muestra algún efecto de degradación. El estado de Tlaxcala no es la excepción, pues según información del INEGI1 se considera la totalidad de la superficie estatal como afectada por procesos erosivos con diversos grados de afectación desde leves hasta altos, ya que de las 401,600 hectáreas que conforman la superficie de la entidad, 120 mil presentan un grado de alteración. Esto hace que la erosión sea uno de los principales problemas estatales.


Cuadro 1

Estimación de áreas erosionadas por entidad (Ha)



En lo que se refiere a las entidades de la República Mexicana, Tlaxcala ocupa el séptimo lugar en erosión, ya que por lo menos 93% de los suelos están erosionados en diversos grados: 70,645 hectáreas presentan erosión inicial; 209,207, erosión severa; 73,346 erosión acelerada y 9,596 están totalmente perdidas. En términos porcentuales se observa que 18% del territorio tlaxcalteca presenta indicios de erosión; 52% erosión moderada; 19% tiene grados erosivos acelerados; 2% totalmente erosionado y sólo 9% no presenta procesos erosivos (cuadro 1).
Como las zonas boscosas se encuentran principalmente sobre laderas, al ser deforestadas son muy susceptibles a la erosión eólica e hídrica. La erosión eólica es la que más daño causa a la tierra; las zonas más erosionadas se encuentran en municipios como Altzayanca, Tequexquitla, Terrenate, Hueyotlipan, Sanctórum e Ixtacuixtla, entre otros.2

En nuestro estado la erosión natural se ve fuertemente acelerada por prácticas humanas que provocan que el suelo sea vulnerable al arrastre por agua y viento: el sobrepastoreo que es resultado de exceso de ganado en una extensión de tierra demasiado pequeña y el manejo inapropiado del uso del suelo y del agua, lo que da lugar a un incremento en erosión, salinación y disminución de la humedad del suelo.
La erosión también es causada por la intensiva utilización mecanizada de técnicas agrícolas sofisticadas que utilizan los agricultores. Estos efectos se pueden observar con mayor frecuencia en las áreas agrícolas de los municipios de Terrenate, Españita, Tlaxco, entre otros, ubicados al norte del estado.
Del mismo modo coadyuvan al problema de la erosión, una resiembra o replantación inadecuada de árboles, los cultivos agrícolas en tierras o suelos inapropiados y la compactación del suelo por maquinaria agrícola, pisoteo por el ganado y el impacto de la lluvia contra superficies de suelo desprotegido.
b) Contaminación del recurso hídrico
El estado de Tlaxcala geográficamente se localiza en la parte alta de la cuenca hidrológica del río Balsas, la cual se encuentra gravemente afectada por la contaminación de sus aguas. Según información vertida en el Primer Encuentro sobre Desarrollo Regional realizado en Saltillo, Coahuila, Tlaxcala ocupa el cuarto lugar en polución de las aguas.3 Cabe señalar que todos los ríos de la entidad son considerados zonas críticas y los afluentes resultan auténticos depósitos de aguas negras. Esto ha traído como consecuencia el aniquilamiento de especies acuícolas y ha provocado un desequilibrio ecológico entre numerosas especies de animales y plantas.
Seis de los siete ríos del estado de Tlaxcala presentan altos índices de contaminación, causados por elevadas descargas de desechos sólidos y líquidos degradados de usos domésticos, agrícolas e industriales. El principal río contaminado por tales circunstancias es el Zahuapan y en menor proporción los ríos Atenco, Atotonilco (Tlaxco), el Atlixtac (San Benito Yauquemehcan) y el río Los Negros, entre otros. Cabe señalar que ninguno de ellos presentan índices de contaminación en los mantos acuíferos.4
El río Zahuapan es uno de los cauces que ha preocupado en mayor medida a la comunidad y autoridades del estado, principalmente por los altos índices de contaminación ya que sus afluentes traen tanto agua limpia proveniente de manantiales como aguas negras no tratadas por usos municipales, industriales, diversos comercios, de servicios, agrícolas, pecuarios, domésticos y en general de cualquier otro uso, así como la combinación de todos ellos.
La contaminación de cuerpos de agua en el estado se debe, principalmente, a las aguas residuales urbanas que se vierten en los diferentes cauces y ríos que atraviesan la entidad. La mayor emisión de residuos no obedece a las descargas de los ayuntamientos más desarrollados, por ejemplo los de la ciudad de Apizaco y Huamantla. En la entidad existen instalados seis sistemas de tratamiento de aguas residuales, el problema son los pequeños asentamientos humanos que vierten sus aguas residuales sin ningún proceso de tratamiento.
El origen de los principales contaminantes que presenta el agua se genera en los desechos domésticos: detergentes y jabones, basuras; desechos industriales: colorantes y pigmentos, disolventes, ácidos grasos, sales, metales y diversas sustancias químicas que suelen ser tóxicas para la salud del hombre, la flora y fauna; así como los agropecuarios: insecticidas, plaguicidas, sales inorgánicas, minerales, desechos animales y fertilizantes entre otros.

c) Deforestación
La deforestación se ha convertido en un problema global. México es uno de los países que presentan mayores índices de deforestación mundial ya que pierde anualmente de 370,000 a 800,000 hectáreas, aunque han llegado hasta un millón y medio.5
En Tlaxcala, la deforestación es un problema que se ha venido presentando a través del tiempo pues se conocen datos donde se demuestra el deterioro y severo despale que ha sufrido el área boscosa. Por ejemplo, se conoce que originalmente la entidad tenía una superficie de 350,000 hectáreas de bosques y en 1949, tenía sólo 108,000 hectáreas Actualmente se reportan 59,000 hectáreas deforestadas (Gráfica 1).
Todos los municipios del estado tienen en común la reducción de sus áreas arboladas; sin embargo, la región del volcán de la Malinche es una de las zonas naturales más boscosas.
En estaárea, a pesar de estar protegida, la superficie arbolada ha disminuido de manera notable y han aumentado las áreas de cultivo en las laderas del volcán. Por ejemplo, en el año de 1500 se reportaba un total de 75,000 hectáreas, en 1936, 30,000 y actualmente, sólo 15,000;6 es decir, que en durante los últimos 60 años la superficie boscosa ha disminuido a la mitad.
De acuerdo con los datos derivados del Inventario Forestal de Gran Visión el estado de Tlaxcala tiene 52,683 has de zonas arboladas, las cuales representan el 13.11% del territorio estatal (4,016 km2). De esta superficie, solamente se están protegiendo 16,433 hectáreas de bosque, mismas que le corresponden al área del volcán de la Malinche y 36,250 hectáreas no reciben ninguna protección por ser zonas de bajo aprovechamiento y rendimiento forestal, no tienen un programa de manejo definido, por ello se hace necesario que exista una planificación ambiental estatal que permita auditar los aprovechamientos, y por otra parte vigilar la masa forestal que no tiene un programa de manejo basado en estrategias de desarrollo sustentable.
d) Pérdida de la biodiversidad
La PROFEPA7 determinó que en el estado de Tlaxcala existen 30 especies de flora y fauna silvestre bajo condiciones de protección, mismas que fueron comprobadas con la norma oficial mexicana (NOM-059-ECOL-1994) que determina las especies y subespecies de flora y fauna silvestre, terrestre y acuáticas, en peligro de extinción, amenazadas, raras y sujetas a protección especial.
En el estado se hallan bajo condiciones de protección una especie anfibia, dos de reptiles, dieciseis de aves, tres de mamíferos, cuatro de hongos y cuatro forestales.
El águila, por su parte, se encuentra en peligro de extinción y en amenazadas: búho, halcón peregrino, calandria de agua o zapotera, halcón, gavilán azulejo mulato, garcita de tular, rata de campo y cacomixtle. Entre las especies florísticas amenazadas se encuentran el hongos Teracua cavica y hongo de mosco.
Las especies sujetas a protección especial son aquellas que están bajo condiciones de limitación o vedas en lo que se refiere a su aprovechamiento debido a que tienen poblaciones reducidas o una distribución geográfica restringida. Entre ellas se encuentran: el ajolote, la víbora de cascabel, el gavilán cola negra, el pato golondrino, el pato chalcuan, el pato boludo, y cerceta de alas azules. En la misma situación se hallan el cedro blanco y el fresno, y los hongos yemita y pancita o pambazo.
Las especies raras (aquéllas cuya población se halla biológicamente restringida a áreas de distribución reducidas a hábitat específicos ) que se localizan en Tlaxcala son: la liebre cola larga, el camaleón, la gallinita y el chipre suelero.
El estado de Tlaxcala no cuenta con inventarios completos de flora y fauna; sin embargo, se tiene conocimiento de algunas especies que han sido erradicadas o cuyas poblaciones siguen reduciéndose, tal es el caso del maguey y del gusano de maguey. La sobreexplotación de estas dos especies se debe, principalmente, a que los mixioteros, no desean continuar con su cultivo y prefieren la introducción y cambios hacia otros cultivos;3 principalmente en las regiones de Domingo Arenas, Villa real, Villa Alta, Calpulalpan, Terrenate y Tlaxco. Otras especies que se encuentran todavía más restringidas son algunas orquídeas terrestres localizadas en el municipio de Ixtacuixtla, así como las plantas insectívoras que se localizan en algunas de las partes más húmedas de Tlaxco y Calpulalpan.

e) Contaminación por residuos sólidos y peligrosos
En el ámbito de la contaminación ambiental por residuos sólidos ocupan un lugar preponderante, ya que son materiales que requieren de un manejo eficaz y con normas de seguridad para evitar daños al ambiente. Por su origen, los residuos sólidos municipales se pueden definir como todos aquellos materiales derivados de las actividades urbanas (las domiciliarias, comerciales y de establecimientos de servicios), así como lo generados por la infraestructura urbana como la red vial, el transporte y las redes de drenaje. En términos generales se puede decir que las principales fuentes de generación de residuos sólidos municipales son los domicilios, los comercios, los servicios, las áreas públicas y, principalmente, la industria.
Por ejemplo, la basura es un problema en el estado de Tlaxcala ya que se generan hasta 800 toneladas diarias. Los servicios de limpieza y recolección captan hasta 600 toneladas que son depositadas en los cinco rellenos sanitarios que existen en la entidad; el resto es arrojado a tiraderos clandestinos, barrancas, ríos o en las orillas de las carreteras.
Se estima que cada tlaxcalteca urbano genera diariamente 800 gramos de basura; en cambio la población rural a nivel individual produce 500 gramos de compuestos, en promedio, por un 40 ó 50% de materia orgánica.
De acuerdo a los datos de SEMARNAP (1997)8 se proyecta que la producción de basura per capita en Tlaxcala alcanzará poco más de 900 g en el 2000 y 1 kg para el 2005, lo que llevará a una generación, tan sólo para la ciudad de Tlaxcala, de aproximadamente 25 mil toneladas al año. Ante este panorama, la gestión de los residuos sólidos municipales debe comprender la recolección, el manejo y la disposición final de los mismos, y tener como objetivo la preservación de la salud pública. Los municipios que registran más contaminación por desechos sólidos son: San Pablo del Monte, Papalotla, Tenancingo, Mazatecochco, Ixtacuixtla y Nativitas.9
La cantidad de basura que se genera como resultado de las actividades diarias es un importante agente de deterioro ambiental; además, de ocupar grandes espacios para su confinamiento. Deshacerse de las grandes cantidades de basura que genera nuestro moderno estilo de vida consumista es uno de los conflictos socioculturales más difíciles de resolver. Por ello debemos enfocar el problema de los residuos sólidos teniendo en cuenta la planificación y la gestión ambiental como objetivos principales para tratar y disminuir la cantidad de desechos.

Gráfica 1

Disminución de la superficie boscosa del estado de Tlaxcala





Por otra parte, en la entidad existen 500 empresas productoras de residuos peligrosos, de las cuales 32 son consideradas de alto riesgo dentro de la petroquímica y la rama metal-mecánica básica e industria eléctrica. Según un estudio del Instituto Nacional de Ecología, cada año Tlaxcala genera 60 mil toneladas de residuos peligrosos industriales. Este volumen representa el 0.75% de la totalidad del material que se genera en las 32 entidades federativas del país. Sin embargo, sólo el 12% de los desechos generados reciben un manejo adecuado como confinamiento controlado, reciclaje (principalmente de solventes, aceites, residuos metálicos y plásticos, reciclaje energético de residuos de combustibles y exportación de aceites contaminados.10
Los problemas antes mencionados no son los únicos; en la entidad también se presenta contaminación por ruido producida principalmente en las zonas urbanas a causa del flujo vehícular, y por la instalación de algunos talleres y fábricas dentro del área urbanizada. Los obreros se quejan que en las fábricas se produce mucho ruido debido al alto volumen de la música; también por la actividad constante que realiza el hombre en su casa, en su trabajo y hasta en sus diversiones.
De igual forma se presenta la contaminación atmosférica. Se emanan olores putrefactos por las emisiones de humos, desechos industriales, polvos provenientes de desechos secos y gases. Esta contaminación no es considerada de gravedad, pero en el futuro es necesario tomar las medidas y desarrollar estrategias de prevención.


III. Políticas y lineamientos gubernamentales


La conservación del medio ambiente y el rescate ecológico en Tlaxcala requiere de implementar estrategias de desarrollo integrales y políticas estatales basadas en una planificación ambiental regional que atiendan, simultáneamente, el ámbito naturaleza-sociedad; es decir, la búsqueda de una adecuada relación del hombre con su medio. En el terreno biológico se refiere a la restauración y manejo ecológico de las áreas impactadas negativamente.
Hagamos un recuento de las políticas gubernamentales en la materia de 1987 a 1999. En el Plan Estatal de Desarrollo de Tlaxcala de 1987-1993, las líneas de acción que se implementaron, con relación a la preservación del medio ambiente fueron las siguientes:
- Establecer un acuerdo de coordinación para elaborar un diagnóstico de los niveles de contaminación en el estado y una estrategia que permita revertir el proceso.
- Identificar las industrias que no cuenten con equipos anticontaminantes de aguas, suelo y aire, para que los adquieran y se controle el uso eficiente de los mismos.
- Actualizar los reglamentos aplicables en materia de desarrollo industrial para el establecimiento y ampliación de industrias en el estado, seleccionándolas por rama de producción en los diferentes corredores para un mejor control de desechos contaminantes.
- Garantizar los resultados de la campaña anual de reforestación conservación y aprovechamiento racional del bosque, a través de la participación organizada de los productores y de la comunidad.
- Identificar a los quince municipios que cuenten con condiciones ecológicas idóneas para el establecimiento de viveros municipales.
- Diseñar y aplicar programas de recuperación y conservación de suelos, en las áreas de erosión severa y con la siembra de magueyes y nopales en torno a las parcelas, así como el uso de desechos orgánicos procesados para regeneración de suelos.
- Identificar los cuerpos de agua contaminados, mediante técnicas específicas, con miras a explotarlos integralmente y protegerlos con la construcción de bordos y siembra de magueyes.
- Establecer un acuerdo de coordinación para la construcción de un jardín botánico, su consolidación operativa y su mantenimiento permanente, concertando la participación de los sectores social y privado.
Por su parte, el Plan Estatal de Desarrollo de 1993-1999 se menciona que en Tlaxcala al igual que en el resto del país, el crecimiento demográfico e industrial, la urbanización no planificada ha deteriorado el ecosistema, de tal forma que en la actualidad es patente la degradación y agotamiento de sus recursos naturales. Ante este problema el gobierno de Tlaxcala se planteó las siguientes acciones:
- Fortalecer las funciones relativas a la ecología y mejoramiento ambiental.
- Educar y concientizar a la población en relación a las conductas que debe llevar a cabo para la preservación y cuidado del medio ambiente. En este sentido se impulsará el estudio de la materia especialmente en los niveles básicos de educación.
- Involucrar a todos los sectores de la población en la responsabilidad conjunta que implica la solución de los problemas ambientales.
- Establecer ordenamientos legales basados en criterios de orden científico y técnico, encaminados al uso y protección de los recursos naturales.
- Determinar y establecer zonas de reserva ecológica en la entidad.
- Llevar a cabo acciones sistemáticas de reforestación.
- Continuar y fortalecer los sistemas de monitoreo de descargas de aguas residuales, buscando alternativas para su tratamiento y reuso.
- Promover la intensificación de los programas de verificación vehicular y de emisiones industriales.
- Reforzar la construcción y equipamiento de los rellenos sanitarios.
- Buscar sistemas alternativos para la recolección, reciclaje y disposición final de residuos sólidos.
- Promover la protección y rescate de los mantos acuíferos.

IV. Acciones realizadas

De acuerdo a las líneas de acción que se establecieron en los Planes Estatales, en el estado de Tlaxcala se han realizado una serie de actividades y estrategias para el desarrollo ambiental y el manejo de los recursos deteriorados. En este apartado analizaremos primero se analizan las acciones que se han implementado para combatir la problemática ambiental durante dos periodos: de 1987 a 1992 y de 1993 a 1998.
Entre las actividades que se realizaron en el primer periodo para luchar contra el deterioro ambiental destacan el combate a la erosión por lo que se intensificaron las acciones de conservación y rehabilitación de suelos, se buscó su regeneración mediante el enriquecimiento de nutrientes a la superficie, y se llevaron a cabo actividades para su recuperación, a través de la incorporación de 20 mil toneladas de abono de bovino, que beneficiaron a 400 hectáreas en 1989. Asimismo, se dio atención a 3 mil 766 hectáreas de tierras erosionadas para incorporarlas posteriormente al cultivo de temporal, todo ello como parte de las acciones tendientes a restablecer el equilibrio ecológico de Tlaxcala. También se efectuaron trabajos de regeneración, principalmente en la zona de la Malinche, en Tlaxco y en los cerros Blancos de Totolac.
Para continuar con el mejoramiento de la calidad de los suelos erosionados y la preservación de las especies nativas, en 1990, se realizaron diversas investigaciones especializadas; los suelos agrícolas se robustecieron con la incorporación de 26 mil toneladas de abono orgánico en más de 500 hectáreas; en lo que se refiere a la recuperación de suelos erosionados, se rehabilitaron mil 11 hectáreas. Otro aspecto importante que se ha atendido es la disminución del efecto erosivo en los suelos no agrícolas.
En 1991 el rescate de suelos para su incorporación productiva se realizó mediante la roturación de mil hectáreas, la rehabilitación de 305 hectáreas y la aplicación de materia orgánica para la regeneración de otras 146, además del movimiento de 61 mil metros cúbicos de tierra por el desazolve de canales.
Por su parte, el control de la contaminación del agua y su incidencia en la cuenca Atoyac-Zahuapan se atiende con diversas acciones del sector público y privado. En 1989 se rehabilitaron 18 lagunas de tratamiento, se construyeron 3 colectores y se equiparó la unidad de control de Tlaxcala; los empresarios destinaron una inversión para la construcción de 38 plantas de tratamiento en el interior de sus fábricas.
En 1990 el sistema regional de control de la contaminación del río Zahuapan continúo su consolidación al entrar en operación dos plantas de tratamiento de agua: «Apizaco B» y «Atlamaxac». Posteriormente, con asesoría técnica de la Comisión Nacional del Agua y SEDUE, se optimizó la operación de 6 plantas de tratamiento.
En 1992, a fin de mejorar la calidad del agua, se buscó la consolidación de las unidades regionales de tratamiento, para lo que se construyeron lagunas de tratamiento para alcantarillados municipales y se rehabilitaron algunas para reforzar la ya existentes. También se mejoraron los instrumentos y técnicas de laboratorio empleadas en Tlaxcala para analizar los parámetros de la calidad del agua y de los gases de combustión. Previo análisis y derivados de los resultados, se establecieron condiciones particulares de descarga de aguas resi-duales a empresas ubicadas en el estado.
La reforestación es una de las acciones que de forma cotidiana se realiza en la entidad, mediante una estrategia integral que se sustenta en la participación de los tres ámbitos de gobierno y la acción concertada con los sectores social y privado. En 1989 se plantaron 3 millones de árboles, en 1990 se reforestó con un millón 830 mil ejemplares en 27 municipios de la entidad, en 1991 se produjeron poco más de 10 millones de árboles y se plantaron 2 millones 757. En 1992 se logró la plantación de 2 millones 400 mil árboles y se considera el año con menor superficie forestal siniestrada. Para alimentar el programa de reforestación en este periodo llegaron a funcionar 19 viveros, 5 federales y 14 municipales, los que en conjunto produjeron más de 3 millones de plantas.
Para regularizar la disposición de la basura, que es un problema grave dio inicio la operación del Sistema Integral de Manejo de Desechos Sólidos (SICORT), empresa gubernamental que da tratamiento en sus instalaciones a un promedio de 560 toneladas diarias de basura en seis rellenos sanitarios. Además de esta acción se suma el esfuerzo desarrollado en campañas de información y educación para el reciclaje y selección de basura.
El mejoramiento de la calidad del aire es una preocupación constante, por lo que la Secretaria de Desarrollo Social en coordinación con el Gobierno del estado ha mantenido estrecha vigilancia de las emisiones industriales y ha promovido la instalación de 16 sistemas anticontaminantes. Sin embargo, no se cuenta con datos estadísticos que permitan determinar las consecuencias y efectos de este tipo de problemas.
Durante el periodo 1993-1998 las acciones más importantes que se llevaron a cabo fueron la creación de la Coordinación General de Ecología en 1993 y la estructuración de un marco jurídico estatal formado por la Ley de Ecología y de Protección al Ambiente del Estado que se publica en 1994. En complemento a la Ley antes citada, se publicaron en 1994 el Reglamento Interior de la Coordinación General de Ecología y el de Residuos Sólidos no Peligrosos. En 1995 el de Prevención y Control de la Contaminación Generada por Vehículos Automotores. En 1996 el de Impacto Ambiental, el de Manejo de Recursos Vegetales, de Prevención y Control de la Contaminación del Agua y a la Atmósfera y el de Emisiones de Ruido, Energía Térmica y Lumínica. En 1997, el de Manejo y Administración del Parque Nacional Malinche.
Además, se publicaron dos acuerdos y dos normas estatales: en 1995, el que establece las cuotas que los usuarios deben pagar por la conducción y saneamiento de sus aguas residuales en las plantas de tratamiento y en 1996 el que determina las tarifas por la disposición final de los residuos sólidos no peligrosos en los rellenos sanitarios. En 1997 se publicó la Norma Técnica Estatal que define los criterios y especificaciones para la protección y fomento de los Metepantles y la relativa a la infraestructura e identificación institucional que deben observar los centros de Verificación Vehícular autorizados en la entidad. En 1997 fueron publicados el Decreto de Adiciones y Modificaciones al Reglamento en Materia de Prevención y Control de la Contaminación Generada por Vehículos Automotores.
Asimismo, en 1994 se crean las Comisiones Municipales de Ecología, que son órganos de carácter administrativo cuyas funciones y objeto son: analizar y resolver los problemas ambientales del municipio, así como vigilar que se ejecuten las disposiciones y acuerdos del Ayuntamiento en materia ecológica; preparar estudios acerca de los problemas ecológicos del municipio y con base en ellos elaborar el proyecto de reglamento respectivo. Realizar las labores de concertación con la ciudadanía para difundir los programas oficiales de la materia y propiciar la participación ciudadana en las tareas que de ellos se deriven.
Con respecto a la reforestación, en el periodo 1993-1998 se logró la plantación de más de 26 millones de árboles (incluyendo frutales, nopales y magueyes). Cerca de 24% fueron plantados en el Parque Nacional La Malinche, bajo un programa de reforestación que tuvo la garantía de supervivencia de cuando menos el 90% de los árboles sembrados a un año de su realización, así como la supervisión y evaluación directa por parte de las autoridades federales, municipales y comunidades de la zona.
Se realizaron acciones para el tratamiento de las aguas residuales para que no sean vertidas a cuerpos receptores, especialmente en la Cuenca del Atoyac-Zahuapan y algunas localidades aledañas a la Laguna de Atlangatepec. También se llevaron a cabo acciones para el mejoramiento de infraestructura y sustitución de equipos, lo que permitió incrementar el volumen de aguas tratadas. Para este mismo propósito se incorporó tecnología de vanguardia que oepra desde 1996 en el pantano artificial de Quilehtla, y que utiliza material vegetal para limpiar las aguas; su eficiencia de operación es de 95% y su capacidad de 118 mil metros cúbicos por año. Por su parte, los mismos niveles de eficiencia y una capacidad de tratamiento mayor a los 612 mil metros cúbicos anuales se hallan presentes para verter el agua tratada en la laguna de Totolcingo, uno de los principales mantos acuíferos del estado.
La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente, en coordinación con la Procuraduría General de la República han realizado una serie de acciones para evitar la explotación de los recursos naturales. Por ejemplo, han puesto gran interés en la preservación de especies amenazadas y protegidas, se ha controlado el aprovechamiento irregular de la flora y la fauna mediante recorridos de vigilancia en todo el territorio, se han realizado operativos de revisión a vehículos en las principales vías de comunicación y verificaciones en sitios de comercialización de aves canoras y de ornato e inspecciones a actividades relacionadas con el aprovechamiento de algunas especies vegetales. Para proteger la fauna silvestre y conocer su potencial, se logró que la entidad estuviera en veda en la temporada 1997-1998.
Además, para vigilar el aprovechamiento de los recursos naturales, se constituyeron los Comités Forestales de Cuapiaxtla, Calpulalpan, Sanctórum, Tlaxco y el de Piedra Canteada, en Nanacamilpa, así como el de vigilancia de pesca y caza de la presa de Atlangatepec.
El Sistema de Control de Residuos Sólidos continúa conformado por seis rellenos sanitarios regionales. Asimismo, en 1997 se dio inicio a las actividades de regulación de los centros de acopio para su reciclamiento. Con ello se reduce el volumen que se deposita en los rellenos sanitarios y se prolonga su vida útil. Desde 1995 se cuenta con una celda especial para la disposición y control de residuos biológicos infecciosos. Es importante resaltar que Tlaxcala es el primer estado, a nivel nacional, que realiza la separación de los residuos biomédicos y su desactivación biológica.
Las actividades de limpieza se consolidan a través de los servicios municipales y de la captación de los residuos de origen industrial y de servicios, evitando su disposición inadecuada. Se realizó el saneamiento de tramos carreteros, y con el apoyo del Programa de Empleo Temporal se llevó a cabo la limpieza de barrancas, cuerpos de agua, panteones, carreteras, manantiales y tiraderos clandestinos, lo que permitió reducir la contaminación del suelo y la proliferación de fauna nociva. En apoyo a esta actividad se dotó de camiones de volteo a los 16 municipios creados en 1994.
Para prevenir la contaminación visual se establecieron los lineamientos y acciones específicas, determinando los lugares adecuados de fijación de propaganda y publicidad, promoviéndose como medida complementaria, el saneamiento y retiro de éstas con la participación de los ayuntamientos y partidos políticos. Se definieron las medidas para la regulación de la actividad de establecimientos de compra-venta de autopartes usadas y se están designando sitios para la disposición de escombros.
Para controlar la contaminación atmosférica causada por vehículos automotores, operan 20 centros de verificación vehicular, que adecuaron sus instalaciones y modernizaron su equipo, profesionalizaron el servicio y se aplicaron evaluaciones a su personal, realizándose en este periodo 71,640 revisiones.
En la preservación de nuestros recursos naturales, es fundamental la educación y la concientización en la población, en relación con las conductas para el cuidado del entorno ecológico, por lo que se han realizado campañas de concientización y se han impartido pláticas, talleres, seminarios y conferencias, así como también se publican boletines de prensa y se transmiten entrevistas en televisión y radio.


V. Conclusiones

El estado de Tlaxcala presenta problemas ambientales que pueden traer consecuencias negativas si no se toman las medidas necesarias para su solución. Ejemplos claros son la contaminación del agua y la calidad del agua, cuyos niveles llegan a ser preocupantes en algunas regiones por la presencia de metales pesados y otros elementos nocivos de origen industrial como solventes, o domésticos como los detergentes.
En este sentido, es necesario generar sistemas de reciclaje y reuso que permitan disminuir la generación de residuos sólidos, ya que en la entidad la disposición final sólo se realiza mediante su confinamiento en rellenos sanitarios, por lo que debe considerarse prioritario alargar su vida útil.
La deforestación puede traer serios impactos ambientales y sociales considerando que los bosques son los reguladores del ambiente, evitan la erosión, eliminan el bióxido de carbono y proporcionan oxígeno, favorecen la recarga de los acuíferos, preservan la diversidad de flora y fauna y gracias a ellos, es mayor la eficacia con que pueden aprovecharse los recursos hidrológicos para casi todas las actividades humanas: riego, usos domésticos, usos industriales, y producción de energía eléctrica.
Los gobiernos del estado durante el periodo de 1988 a 1999 han hecho esfuerzos para combatir el deterioro ambiental, a través de las diferentes acciones analizadas; sin embargo, hace falta mayor participación y conciencia ciudadana para obtener éxito en las labores que se emprendan.
Del primer periodo de gobierno se puede concluir que se trató de dar la misma importancia a todos los problemas ambientales y se intentó atenderlos de forma equilibrada; mientras que en el segundo periodo se dio mayor importancia a la creación del marco jurídico, que se consideró la base para resolver el deterioro ambiental a largo plazo y se priorizaron las actividades para atender los problemas que se valoraron como más relevantes.
Consideramos que el marco legal que se estableció en este último periodo traerá como consecuencia la disminución del deterioro ambiental en todos los aspectos, cabe señalar que es importante que se de a conocer y se aplique la legislación ecológica y los reglamentos de forma extensiva y que se hagan cumplir de manera efectiva.
A pesar de las líneas de acción que se han formulado para combatir la problemática ambiental, ésta continúa creciendo a pasos gigantescos y si no se hace cumplir el marco jurídico lo antes posible, el estado de Tlaxcala será uno de los más deteriorados ambientalmente en la República Mexicana.

jueves, 26 de febrero de 2009

PLAZA SAHARA, en medio del desierto del shara


Dinámica de los ecosistemas


Los ecosistemas no son entidades estáticas, al contrario, mantienen un continuo proceso de transferencia de materia y energía. Ese flujo es ajustado o readaptado ante cualquier variación del ambiente que incida sobre ellos.
La sucesión ecológica La tendencia de los ecosistemas es alcanzar el clímax o comunidad climácica. Se denomina así al estado teórico de máxima estabilidad y eficiencia ecológica. El proceso que se desarrolla hasta alcanzar el clímax se llama sucesión, y al conjunto de fases que se van atravesando desde el ecosistema inicial (todas ellas de complejidad creciente) se les denomina serie evolutiva. La sucesión es resultado de la modificación del ambiente físico por causas internas o externas a la comunidad. Culmina con el establecimiento de un ecosistema biológicamente estable (se alcanza el clímax) que se perpetúa a sí mismo.
Odum definió la sucesión ecológica como un proceso ordenado de cambios direccionales de la comunidad y por tanto predecibles. Las comunidades clímax mantienen un doble equilibrio de las especies entre sí, y éstas con las propiedades ambientales; es pues la máxima meta biológica a la que una sucesión puede llegar.
Las sucesiones suelen referirse a las comunidades vegetales. Durante el clímax de estas comunidades (cuya estructura es compleja) los fenómenos de competencia en el seno de la asociación es ínfimo, manteniéndose una armonía óptima con las condiciones del suelo y la climatológica del lugar.
En las fases más tempranas de una sucesión las especies más abundantes son las denominadas oportunistas, que se reproducen a gran velocidad pero que poseen una escasa biomasa. En el proceso éstas especies serán sustituidas por otras con menor tasa de reproducción y mayor biomasa. Cuando un ecosistema se constituye inicialmente por medio de las sucesiones, a la primera comunidad que se instala en él se le denomina pionera. Las diferentes fases de sucesión en que puede encontrarse el ecosistema constituido son las de, sucesión primaria o serie completa, sucesión secundaria y sucesión regresiva o disclimax:
Sucesión primaria o serie completa
Se denomina así al proceso de sucesión que se desarrolla desde una zona desnuda hasta alcanza la clímax. Sucesión secundaria Se produce cuando la sucesión parte de una etapa cualquiera de la serie causado por una perturbación, sea un incendio, inundación, etc.; en este caso, transcurrido un tiempo retorna a la serie primaria completa. Por tanto, toda sucesión primaria conduce y culmina en el clímax.
Sucesión regresiva o disclimax Son las que llevan en sentido contrario al clímax, es decir, hacia etapas inmaduras del ecosistema. Las causas del disclímax tienen su origen en el ambiente, y muy destacadamente en la acción del hombre. No se trata de una sucesión ecológica invertida, sino de una regresión forzosa del ecosistema por la destrucción de alguna etapa de la serie, por ejemplo a causa de un incendio forestal sin regeneramiento, que podría dar paso a la desertización.
Cuando el biotopo inicial del que parten las comunidades hacia el clímax tiene un origen acuático, a las series de sucesión se les denomina hidroseries. Si las series se producen sobre un terreno seco se les denominan xeroseries.
Otras situaciones de las series evolutivas Básicamente ya se han descrito los diferentes estados que se pueden dar en una sucesión. Los siguientes términos refieren otras situaciones que se pueden dar en las series evolutivas:
Anteclímax Es una etapa permanente previa a la clímax, a causa de condiciones adversas que no permiten llegar a ésta (por ejemplo, la persistencia del viento en una determinada región sólo permite que se alcance la fase arbustiva, aunque la clímax sea el bosque).
Paraclímax Es una formación vegetal que, aunque no es la clímax correspondiente a la zona donde se desarrolla, se encuentra en un estado de equilibrio tal que se excluye una posterior evolución, por lo que alcanza casi las condiciones de una clímax.
Peniclímax Es el clímax que ha experimentado la influencia antropógena y aparece con algunas variaciones en cuanto a su composición y a la proporción entre sus distintos elementos.
Colonización
Es el proceso de establecimiento de especies biológicas en un área anteriormente no ocupada, como el crecimiento de cañaverales en los márgenes de un lago en colmatación o la instalación de aves marinas en una isla volcánica.
Equilibrio
Es el estado de un medio o ecosistema cuya biocenosis se mantiene sin grandes cambios durante largo tiempo, debido a que las influencias climáticas, edáficas y bióticas son muy estables y se limitan unas a otras.
Madurez
Es el estado en que un ecosistema se considera desarrollado. Depende de ciertos factores, como la diversidad, la estabilidad y la productividad. El ecosistema maduro se encuentra en las etapas más avanzadas de la sucesión.

DESIERTO DEL SAHARA
El desierto del Sahara o del Sáhara (formas igualmente válidas, pero con distinta acentuación y pronunciación) es el desierto cálido más grande del mundo, con unos 9.065.000 km² de superficie. Está localizado en el norte de África, separándola en dos zonas: el África mediterránea al norte y el África subsahariana al sur. Limita por el este con el Mar Rojo, y por el oeste con el Océano Atlántico; en el norte con las montañas Atlas y el mar Mediterráneo. Tiene más de 2,5 millones de años. Su nombre deriva del árabe ṣaḥrā صحراء traducción de la palabra tuareg de Teneré (desierto). Se extiende por el territorio de los siguientes países: Argelia, Túnez, Marruecos, Sáhara Occidental, Mauritania, Malí, Níger, Libia, Chad, Egipto y Sudán, aunque se sabe que el Sahara se expande y contrae a ciclos regulares, de tal forma que sus fronteras con los distintos territorios son poco constantes.
Este desierto comparte frontera con casi todos los países del norte de África, donde predomina la cultura árabe. Las dunas comienzan muy cerca del Alto Atlas y se extienden hasta zonas tropicales más al sur. En las faldas del Atlas Marroquí (Alto Atlas), sólo hay vegetación unos metros más allá del curso de los pobres ríos. Sin embargo, ésta tiene un verdor intenso que contrasta con la arena circundante. Abundan las palmeras de dátiles. En ocasiones los oasis están canalizados, para garantizar el riego en las zonas de siembra. Muchas veces el agua no proviene de ríos, sino de acuíferos subterráneos a los que se accede mediante un pozo.
Se sabe que su composición es de grava, arena y dunas. Al contrario de lo que se cree, tres cuartas partes de este desierto son de grava, siendo la restante cuarta parte de arena y dunas.
Ecorregiones
El Sahara comprende varias ecorregiones distintas que, debido a sus diferencias en temperatura, precipitaciones, elevación y geología, albergan comunidades de plantas y animales diferentes. Según WWF, las ecorregiones del Sahara son:
Desierto costero atlántico: Ocupa una estrecha franja a lo largo de la costa del océano Atlántico, donde la neblina generada por la corriente de las Canarias proporciona suficiente humedad para el crecimiento de líquenes y plantas suculentas.
Estepa del Sahara septentrional: Ocupa el borde septentrional del desierto. Es una zona de transición entre las regiones de clima mediterráneo al norte y el desierto árido al sur.
Desierto del Sahara: Es la parte central del Sahara, extremadamente árida, donde la lluvia es mínima y esporádica.
Estepa y sabana arbolada del Sahara meridional: Se trata de la zona de transición entre el desierto árido y la sabana de acacias del Sahel.
Monte xerófilo del Sahara occidental: Comprende varias mesetas volcánicas en el oeste del desierto, con un clima más húmedo y fresco: la mayor de ellas es el Tassili n'Ajjer.
Monte xerófilo del macizo del Tibesti y el monte Uweinat: Zonas de altitud en el este del Sahara.
Salobral del Sahara: Varias depresiones salinas inundables dispersas por el desierto.
Desierto costero del mar Rojo: la franja costera del mar Rojo, en Egipto y Sudán.
Otras zonificaciones:
Los Tuareg llaman en su idioma tamazig a casi todo ell Sahara: Teneré o Teneré (El Desolado), fuera de la nación Tuareg la plabra Tenere significa principalmente al "desierto del desierto" es decir al área central y más árida del Sahara.
Ergs o edeien es el nombre dado a los "mares de dunas", a las áreas del Sahara en donde predominan las arenas, los ergs son en la actualidad un 20% de la superficie sahariana.
Hamada es el nombre dado a toda zona de desierto pedregoso.
Serir o Seriri o regs es el nombre dado a las planicies cubiertas con pedruscos de grava y arenas con muy ocasional presencia de plantas xerófilas.
Dayas es el nombre que se da a cubetas limitadas de fondos arcillosos, en ciertos casos tienen origen karstico y pueden inundarse durante lluvias excepcionales.
Gueltas o güeltas es el nombre dado a sitios donde se forman lagunas temporarias durante las grandes y excepcionales lluvias.
Sebja es el nombre de lagunas saladas temporarias, éstas estando casi siempre secas son salares.
Shott (Chott) es el nombre de importantes depresiones cuyo fondo suele estar colmado por una costra de sales, los principales shotts se ubican en el norte del Sahara.

viernes, 20 de febrero de 2009

Comunidad ecológica




COMUNIDAD




Una comunidad es un grupo o conjunto de individuos, seres humanos, o de animales que comparten elementos en común, tales como un idioma, costumbres, valores, tareas, visión del mundo, edad, ubicación geográfica (un barrio por ejemplo), estatus social, roles. Por lo general en una comunidad se crea una identidad común, mediante la diferenciación de otros grupos o comunidades (generalmente por signos o acciones), que es compartida y elaborada entre sus integrantes y socializada. Generalmente, una comunidad se une bajo la necesidad o meta de un objetivo en común, como puede ser el bien común; si bien esto no es algo necesario, basta una identidad común para conformar una comunidad sin la necesidad de un objetivo específico.




LA ESTRUCTURA DE LAS COMUNIDADES VEGETALES
(Crawley, Plant Ecology)
La fisionomía de la vegetación está determinada por el tamaño de las plantas dominantes (arboles, o arbustos, , hierbas o musgos, etc.), por su distribución espacial (cubierta contínua o dispersa) y por sus variaciones estacionales (fenología) (perennes, caducas, etc.).
DEFINICIÓN DE COMUNIDAD VEGETAL.
El concepto de comunidad es una abstracción del mismo orden que el de población. Una comunidad consta simplemente de todas las plantas que ocupan un área definida por el ecólogo con el objetivo de su estudio. Ello implica dos cuestiones fundamentales: 1- cuál debe ser la superficie del area, 2- dónde debemos situar dicha superficie. Estas dos cuestiones son el fondo de las controversias existententes en el concepto de comunidad y en las divergencias existentes a la hora de plantear cualquier estudio de la misma. La ausencia de un tamaño estándar de estudio de la comunidad y de un acuerdo sobre si las áreas de estudio deben establecerse al azar o sobre una parte tipicamente representativa de la comunidad, aún persisten hoy día.
Las posiciones más polarizadas del debate las llevaron a cabo Gleason y Clements. Clements creía que las comunidades de plantas eran un sistema integrado cerrado, con propiedades emergentes análogas a las de un supra-organismo. Por el contrario, Gleason veía las comunidades vegetales como una combinación al azar de especies con las mismas adaptaciones y sin ninguna de las propiedades de un organismo (homeostasis, elasticidad, desarrollo predecible, etc.)




Interacción biológica es la que se da entre un organismo y los otros de su ecosistema. En un ecosistema no existen organismos viviendo totalmente aislados de su entorno. Éstos son parte del medio ambiente, rico en elementos no vivos —materia inorgánica— y en otros organismos de la misma o de otras especies, con los cuales forman una interacción. Las relaciones entre las especies pueden ser muy diversas, y varían desde una especie que se alimenta de otra (predación), hasta la de ambas especies viviendo en un beneficio mutuo (simbiosis).[1]
Las interacciones biológicas se clasifican en:




Mutualismo (la relación entre dos especies que se benefician mutuamente no es obligatoria o bien es temporal) , Ejem. Remoras y ballenas o tiburones.


Comensalismo (asociación en la que una especie es beneficiada y la otra no es beneficiada ni perjudicada) Ejem. Pez payaso y la anemona


Parasitismo (interacción en la cual una especie se beneficia y otro es perjudicada. El parásito normalmente es más pequeño que el huésped) , Ejem. Solitarias


Parasitidismo El parasitidismo es similar a la predación en el sentido en que mata al hospedador con el tiempo, los parasitedes, ponen huevecillos sobre o dentro del cuerpo del hospedero.




Sucesion de las comunidades




En la sucesión de comunidades primero se dan pequeños cambios llamados microsucesiones que en forma progresiva vienen a conformar la sucesión principal. Las sucesiones se dan por cambios en los factores abióticos (humedad, temperatura, movimientos orogénicos, deshielos, etc.) o por la llegada o introducción de organismos foráneos u oportunistas que originan una serie de competencias con las especies autóctonas y en la que se impone la más adaptada, por esto las sucesiones están relacionadas con la evolución de las especies. Cuando una comunidad natural se destruye por causas naturales o por intervención humana y el área donde previamente estuvieron es ocupada por otra decimos que ha ocurrido una sucesión secundaria.
Un ejemplo claro es la sucesión lago - estanque - pantano - prado que se observan en muchas áreas ocupadas por antiguas glaciaciones.
El principio de la sucesión ecológica tiene importancia práctica para
el hombre. Cualquier campo que sea arado y luego abandonado presenta una secuencia de vegetaciones sucesivas y con ellas especies animales diferentes para cada secuencia de vegetales. Todo cambio en los caracteres físicos o biológicos del ambiente afectará evidentemente a todas las especies, poblaciones y comunidades en distinto grado.